Como un oxácido del yodo, el ácido peryódico es usado habitualmente en los laboratorios para realizar análisis, investigaciones y diagnósticos, tanto químicos como médicos. También conocido como acido yódico, se presenta en dos tipos de ésteres de peryodato, uno es el metaperyodato de sodio, que es sintetizado a partir del ácido tetraoxoyódico y posee propiedades muy similares a los percloratos, así como también el ortoperyodato de sodio que es extraído del ácido hexaoxoyódico, compuesto descubierto por Heinrich Gustav Magnus y Ammermüller en 1833.
Propiedades del ácido peryódico.
Por lo general, el ácido peryódico es un elemento sólido de aspecto granulado blanquecino e inodoro, aunque a veces se presenta en disolución acuosa en sus formas de ésteres de peryodato, en este sentido, el metaperyodato contiene más agua que el ortoperyodato. Adicionalmente, posee un peso molecular de 191,89 g/mol, y siendo muy soluble en agua o alcohol, manifiesta estabilidad en condiciones normales, sin embargo, reacciona violentamente frente a reductores fuertes, metales pulverizados, bases fuertes o materiales combustibles.
Las soluciones de ácido peryódico en combinación con sulfóxido metílico explotan a los pocos minutos de estar en reposo, asimismo, con hidróxido de tetraetilamonio ocurre una ligera evaporación del líquido seguida por una explosión, también, en contacto con fuentes de calor puede ser combustible y generar un incendio, provocando graves quemaduras en la piel y lesiones oculares.
Aplicaciones del ácido peryódico.
Entre los usos dados al ácido peryódico se encuentra su aplicación en la química orgánica para la realización de los análisis estructurales de los carbohidratos, debido a que es un potente agente oxidante que causa la ruptura de los compuestos que contienen dos grupos de hidroxilos, de esta manera, los fragmenta en aldehídos y en cetonas. Por añadidura, este ácido se emplea en la síntesis de yodatos de metales alcalinos, oxidación de haluros orgánicos, sulfuros o sulfóxidos, generación de yodo y la polimerización química de la anilina.
En el área médica, este compuesto ha sido de gran utilidad para detectar el cáncer, de esta forma, se utiliza en las pruebas de anatomía microscópicas, como también en los diagnósticos celulares para la localización de aldehídos y mucosustancias, en los exámenes histológicos de muestras de tejidos o biopsias, y en las pruebas para provocar reacciones biológicas con el reactivo peryódico de Schiff, permitiendo determinar el glucógeno, las mucinas, así como los filamentos y esporas de micelios.
Todo lo anterior demuestra que el uso del ácido peryódico ha sido de gran utilidad en la medicina, en tal sentido, confiere que el diagnóstico microbiológico este bien orientado.