Conocido como uno de los ácidos minerales más fuertes, el ácido bromhídrico es usualmente empleado en procesos químicos para crear otras sustancias orgánicas e inorgánicas. También llamado bromuro de hidrógeno, se forma cuando el gas es disuelto en agua, de esta manera, su composición molecular está integrada por un átomo de bromo y otro de hidrógeno.
Propiedades del ácido bromhídrico.
El ácido bromhídrico es un gas incoloro fumante de olor picante, que se encuentra como un gas comprimido licuado o en disolución acuosa acromática o amarillenta. Perteneciendo al grupo de los ácidos fuertes es corrosivo en metales y tejidos. Además, su exposición prolongada al calor produce humos corrosivos, tóxicos, y combustibles de materiales como madera, papel, aceite, ropa, entre otros.
La cualidad no oxidante del ácido bromhídrico lo hace soluble al agua, pero puede generar el calor suficiente para que el líquido adquiera propiedades energéticas y hierva explosivamente. En su reactividad con bases químicas como aminas o hidróxidos inorgánicos forma sales, en cambio con metales tales como el aluminio, zinc, estaño y hierro, libera gases de hidrógeno inflamables, que de igual manera, se producen otros tipos de gases, en contacto con sulfuros, carburos, boruros y fosfuros, reaccionando violentamente con elementos como el anhídrido acético, hidróxido de amonio, fosfuro de calcio, ácido perclórico, óxido de propileno, fosfuro de uranio, acetato de vinilo, carburo de calcio, acetiluro de cesio, boruro de magnesio o sulfato de mercurio.
Aunque el ácido bromhídrico en condiciones normales no es inflamable, puede resultar explosivo y tóxico, en este sentido, las condiciones de su manipulación requieren de una higiene estricta y una serie de normas de seguridad industrial como usar protección durante su manipulación, no llevarse a casa la ropa expuesta, además, mantenerlo almacenado en lugares secos o frescos, y separado de otros materiales incompatibles con una ventilación al ras del suelo.
Usos del ácido bromhídrico.
Principalmente el ácido bromhídrico se utiliza como catalizador en la elaboración de productos químicos y farmacéuticos como el bromuro de zinc, calcio y sodio, adicionalmente se emplea como solvente y para corregir compuestos orgánicos con enlaces covalentes entre átomos de carbono y bromo. En el área médica se aplica como sedante o agente antiepiléptico, y en veterinaria como medicamento.
A partir del ácido bromhídrico se crean elementos orgánicos importantes para la industria como el bromuro de alilo o fenol. Asimismo es utilizado como reactivo en los procesos industriales de isomerización, polimerización, hidratación, deshidratación y esterificación. Además de constituir una materia prima fundamental en la fabricación de materiales fotosensibles, tintes, y fumigantes usados en la horticultura o tratamientos para después de la cosecha. A pesar de que las cantidades suelen ser bajas para causar toxicidad, una de las principales fuentes de exposición al ácido bromhídrico en los seres humanos es su presencia en los alimentos.
Jugando un papel determinante como catalizador en reacciones de alquilación y extracción de componentes de algunos minerales, el ácido bromhídrico se emplea en la obtención del cinabrio contenido en el mercurio.
Riesgos del ácido bromhídrico.
Como se indicó anteriormente el ácido bromhídrico es un componente tóxico para el ser humano, ya que la inhalación o el contacto físico con sus vapores pueden ocasionar quemaduras en la piel e irritar los ojos y las membranas mucosas, e incluso hasta causar la muerte. Aunque los efectos por la respiración de este gas se presentan con retraso, causa irritación severa en la nariz, tracto respiratorio y lesión pulmonar.
En cuanto a la ingesta del ácido bromhídrico en solución, origina irritaciones en la boca y en el estómago, siendo muy raro el envenenamiento, ello da lugar a un estado de sobredosis aguda que incluyen náuseas, vómitos, hipotensión cardíaca y dificultades respiratorias. Ahora, si la cantidad ingerida es excesiva produce un síndrome llamado bromismo, que se caracteriza por cambios en el comportamiento, alucinaciones, psicosis, ataxia, irritabilidad, dolor de cabeza y confusión.
Qué medidas podemos tomar en caso de contacto con ácido bromhídrico.
Generalmente, en todos los casos de contacto prolongado con ácido bromhídrico se requiere en primera instancia aplicar los primeros auxilios, si las condiciones del expuesto no mejoran, se debe acudir a ayuda médica. Veamos a continuación qué podemos hacer frente a ello de acuerdo a cada situación.
Si la fricción ha ocurrido en la piel, se debe quitar la ropa contaminada y bañarse con abundante agua, o proceder de igual manera, si ha ocurrido con los ojos. En los casos de inhalación, se recomienda que la persona tome reposo con la cabeza levemente levantada y respire aire puro o respiración artificial si se hace necesario.
Para las situaciones de derrame es recomendable evacuar la zona y eliminar el ácido con agua pulverizada, nunca con chorros de agua. En caso de incendio se pueden usar extintores o la pulverización de agua para disminuir la formación de vapores tóxicos.
Al final de cuentas el ácido bromhídrico a pesar de su toxicidad, posee grandes beneficios para la industria química, farmacéutica y médica.