Un compuesto químico que muchos manuales de seguridad industrial aconsejan en lo posible, evitar su contacto, es el ácido arsénico. También conocido como arseniato de hidrógeno, debido a que es la forma ácida del ion arseniato, se obtiene de la reacción del óxido arsénico con agua. De igual manera, en los laboratorios se logra por medio de la mezcla de sesquióxido de arsénico con ácido nítrico en calentamiento, y de forma natural proviene de los minerales arsenolita y arsenopirita.
Cuáles son las propiedades del ácido arsénico.
El ácido arsénico es un líquido viscoso y translúcido con un peso molecular de 141,94 g/mol, siendo muy soluble en agua y alcohol, conforma un agente oxidante capaz de corroer metales activos como arsénico, hierro, aluminio o zinc, produciendo el mortífero gas de arsina, igualmente, en altas temperaturas y en contacto con estos metales, genera vapores tóxicos de arsénico metálico. Tampoco es compatible con ácidos fuertes como el clorhídrico, sulfúrico o nítrico, y con bases fuertes como hidróxido de sodio, hidróxido de potasio, amoníaco, aminas, acetato de vinilo, epiclorohidrina, óxidos de alquileno e isocianatos.
Estando en la lista mundial de sustancias peligrosas, el contacto con ácido arsénico puede causar mutaciones genéticas, irritación o cambios de pigmentación en la piel, perforación en las vías nasales, vómitos o calambres estomacales, daños al sistema nervioso central y generar necrosis en los tejidos del hígado, pulmones, intestinos o estómago, por ello, es un componente altamente peligroso para el cuerpo humano.
Aplicaciones del ácido arsénico.
Por estar catalogado como uno de los venenos más fuertes, las aplicaciones del ácido arsénico en la industria y en la vida diaria está limitada, sin embargo, se usa para el tratamiento de la madera y la fabricación de colorantes. Con anterioridad este compuesto se utilizó como pesticida y esterilizante de suelos, una práctica que quedó prohibida.
Otra aplicación del ácido arsénico tiene que ver con la desecación en la producción de algodón, de esta forma, el ácido es rociado sobre los arbustos para que las hojas se sequen más rápido, provocando que los capullos de algodón salgan fácilmente. Igualmente, es usado en el forjado del vidrio como un agente de procesamiento en el acabado final, ayudando a eliminar las burbujas que produce el oxígeno gaseoso en este producto.
Se puede agregar para concluir, que los efectos toxicológicos del ácido arsénico en los humanos, ha obligado a los gobiernos del mundo a establecer límites en la cantidades liberadas al medio ambiente de esta sustancia por parte de las industrias, aparte de haber restringido mucho de sus usos.